Seguramente eso debe haber pensado Rubén Zamponi, señalado como uno de los responsables de la derrota de Banfield. En realidad fue quien quedó expuesto en una mala tarde defensiva del Taladro que cometió muchos errores capitalizados por Olimpo de Bahía Blanca. Y ante la reiteración y acumulación de desatenciones en la última línea del equipo durante el torneo (ojo, no solo de Rubén Zamponi), algunos hinchas comenzaron a dar su veredicto con silbidos enfocados en el Tano.
La idea no es caerle personalmente a un jugador sino encontrar la solución al problema independientemente de los nombres.
En el primer gol, la falla en los relevos le permitió a Gustavo Bou recibir un pase entre los centrales y definir sin contemplaciones al fondo de la red.
Ya en el segundo y el tercero, las miradas apuntaron definitivamente a Zamponi. Dos caños, un penal; derivados en dos goles más de Olimpo para cerrar el peor repertorio del central, quién alternó buenas y malas (entre las que se encuentran todos los penales en contra del Taladro) en estos diez partidos.
A partir de esto surgen interrogantes a la hora de continuar en este largo recorrido de 28 partidos restantes.
¿Garnero debe meter mano en la defensa? ¿Ahora más que nunca se debe brindar confianza a la dupla central que antes del inicio del torneo todos marcaban como la mejor que un equipo podía juntar para encarar este torneo? ¿Los problemas en el fondo nacen desde el mediocampo?
Seguramente el DT tendrá la respuesta.
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